Me atrevo a amar, a reír y a bailar otra vez... Has abierto mis ojos a la belleza, a la poesía de la vida...

Me siento más joven, casi como una niña, asombrada por la belleza que impregna todo; una joven pagana vagando con placer, bebiendo el néctar, disfrutando de cada gota...

¿Es esto profundamente inmoral?...

No, es inmensamente moral... Es la única moralidad que existe: ser pagana, exprimir todo el néctar de cada momento de la vida; ser una niña, inocente, persiguiendo nuevamente a las mariposas, recogiendo caracolas o piedras de colores en la playa..., ver la belleza de la existencia que te rodea, permitiéndote amar y ser amada...

El amor es el principio y el fin...

Una persona con amor siempre es joven, incluso cuando se está muriendo... Está lleno de alegría hasta en su muerte, lleno de baile, lleno de canto...

Soy pagana... y tengo la inocencia de los niños, a conocer el milagro y el misterio de la existencia... no a analizarlo, sino a disfrutarlo, no a hacer una teoría de ello, sino a hacer un baile...

Toda la existencia está bailando, excepto el hombre. Se ha convertido en un enorme cementerio... Salid de vuestras tumbas...

No, no es inmoral...

El que diga que es inmoral está contra la humanidad, contra la existencia, contra la alegría, el éxtasis y todo lo que conduce a la divinidad...

Estoy totalmente a favor...

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