Nacemos, no para ser esclavos, sino para ser maestros...

La vida es una oportunidad para crecer, para ser, para florecer... Tienes una canción en tu corazón para ser cantada y una danza para ser bailada, pero la danza es invisible, y la canción... ni siquiera tú la has oído aún... Está oculta en el centro más interno de tu ser y tiene que ser traída a la superficie porque tiene que ser expresada...

Somos vagabundo buscando un hogar, sin saber lo que estamos buscando, quiénes somos o a dónde vamos... Somos accidentales con una existencia superficial, dónde nunca te sientes responsable de nada de lo que pasa...

Seamos conscientes, con capacidad de responder, y estar atentos... actúa con toda la consciencia que te sea posible... porque hasta las cosas más pequeñas se hacen luminosas y estos actos son los que se reunirán en tu interior y finalmente hará que la semilla explote... Es cuando el potencial ha finalizado...

Será arduo, será duro...

Ya, no eres una semilla sino una flor de loto, una flor de loto dorada, una flor de loto de mil pétalos... Es, ese momento cuando la dicha se hace presente...

Ahora no hay que alcanzar nada más, no hay que ir a ningún lugar... puedes descansar... porque el viaje ha terminado...

Pero uno... debe empezar por el principio...

 Y en un ratito vuelvo fijo...