Atravieso el cielo encapotado y de pronto el sol emerge por encima de un mar inabarcable de nubes...
La luz se vuelve nítida...
El horizonte se ensancha y parece no tener limites...
La mirada se pierde en el infinito y la mente se contagia de amplitud...

Pierdo esa visión constreñida que tenía del mundo... Es cuando me doy cuenta que he vivido bajo un falso techo...

Vuelo...

Vuelo con el piloto automático, pues nunca creí que existiera vida más allá de los nubarrones, pues la estrechez de miras y rigidez mental no son sino fruto de una autoridad impuesta...

El cambio no será posible si antes no se produce una transformación personal. Y para alcanzar ese punto hay que escalar una cima...

Abrir el objetivo...
Ganar perspectiva...
Contemplar la vida en toda su anchura...


Y quiero pensar que todos los seres humanos pasamos un día u otro por ese giro en la percepción...



                                         youtube.com/watch?v=gjK4DrDGcWY